miércoles, 31 de julio de 2013

Keep calm and carry on

Eso pensé yo cuando el jueves pasado, a eso de las 10 de la noche, después de lastimarme un dedo del pie derecho jugando al fútbol, unos chicos italianos nos propusieron jugar un mini partido contra ellos. Tremenda paliza y tremendo mi dedo después cuando llegué a la habitación y me quité las zapatillas.
 
Resulta que me lastimé de una forma muy tonta. Jugando al fútbol descalza. Le pegué mal al balón, me crucé con otro compañero por el medio y al final mi dedo hizo "crack". Supongo que al estar en caliente no sentí realmente tanto dolor y por eso me aventuré a jugar el partido contra los italianos. Fui a ponerme unas zapatillas y volví. Y pude correr, pegarle al balón, pegar patadas, todo. Lo que no pude después de terminar y estar 10 minutos parada fue caminar sin cojear ni aguantar el dolor.
 
Mi dedo era un cristo. Hinchado, con derrame, duro como una piedra. De todos modos, decidí ponerle algo de hielo e irme a dormir. No conseguí hielo, pero tenía guisantes congelados. El tema es que a la mañana siguiente el dedo seguía igual de mal, así que de buena mañana me duché y me fui al Hillingdon Hospital. Entré por la puerta que no era y tuve que dar más vueltas que un pato mareado, pero al final, llegué a A&E (Accidents & Emergencies), nuestras Urgencias de toda la vida. Tuve que explicar como 5 veces cómo me había lastimado, a 3 personas diferentes. El caso es que me atendieron rápido, me dieron algo para el dolor y me mandaron esperar en la salita. Después llegó el doctor, y volví a entrar y a contarle todo otra vez. Me extrañó que ni me ofreciesen una silla de ruedas, no sé, igual tenía que tirarme al suelo y gritar de dolor. Resulta que como llegué "caminando" pues entonces tampoco era para tanto. El caso, el médico me tocó 1 milésima de segundo el dedo y me dijo que no le parecía un dedo roto pero que íbamos a hacer unas radiografías. Allí en las radiografías es como la cola del súper. Tu llegas primero, le das el papelito a la enfermera o la de turno, y pasas primero. Si el que está detrás de ti se rompió la pelvis y las 2 tibias no importa, tú vas primero. Me hicieron las radiografías y me mandaron esperar otra vez. Llega el médico y con estas palabras textuales suelta: "Tus radiografías están bien, el dedo no está roto. Toma algo para el dolor y ya te puedes ir. Adiós". No está roto pero dime qué le pasa entonces, qué tengo que comprar en la farmacia, si lo vendo, si qué hago... Nada. Le faltó la palmadita en el hombro.
 
Me fui a la farmacia y compré provisiones en vendas, cremas e ibuprofeno y me sentí desafortunada porque tenía el dedo mal y no podía jugar al fútbol. No por cojear o por no poder caminar bien, por el fútbol. Bendito sea.
 
De eso ya ha pasado casi una semana y mi dedo va mucho mejor, pero aún así, sigue doliendo y sigue sin estar recuperado del todo. No sé, me da que va para largo.
 
Pero no sólo os tenía que contar mi "lesión". No. Hay más. En concreto, dos situaciones que viví esta semana trabajando que me hicieron sentirme muy inútil e impotente.
 
La primera de ellas, este mismo lunes. Un grupo gigante de españoles que viajaban de vuelta a casa vía Madrid-Barajas. Eran 49 niños y 2 monitores. De repente, en facturación las azafatas me comentan que no encuentran la reserva de 30 y pico. Treinta y pico niños sin asiento. Pánico. Es lo único que una piensa. Las azafatas recogieron varios pasaportes y se fueron a intentar solucionarlo, a ver si la reserva finalmente les aparecía en el sistema. Poco puedo hacer yo más que pasarles la información que tengo, comunicar lo que está pasando a mi supervisora y esperar que alguien pueda hacer algo. A mí me toca el papelón de cargar con culpas y con las caras de los niños. Los mantuve al margen en todo momento, y mandé al grupo que estaba ya facturado y a una monitora a pasar seguridad, al menos ellos tenían que llegar al avión. Al rato vienen las azafatas y me dicen que 17, los pasaportes que recogieron, tienen asiento porque forzaron las reservas. Buena noticia: 17 tienen asiento. La consecuencia de hacer eso es que generaron overbooking y los demás se quedaban inmediatamente sin asiento. Me dicen además que los vuelos del resto del día están llenos y que salvo que haya no-shows no pueden hacer más hoy. Uno de los monitores, Alejandro, encantador, rompió su billete y dijo que no volaba si los niños tampoco. Y llegó el momento de decírselo a los niños. Los pobres estaban desconcertados, sabían que pasaba algo y querían saberlo ya. Cuando tuve un minuto me los llevé lejos de los mostradores y les expliqué lo que pasaba. No había ninguna buena noticia, no había nada que yo les pudiese decir que les pudiese aliviar. No tenían asiento y no podía decirles otra cosa. Intenté que estuviesen tranquilos, intenté resolver todas las dudas que tenían, hablé con ellos, les expliqué todo mil veces y les dije que no los iba a dejar solos en ningún momento, que no estaban tirados.
 
Os puedo asegurar que fue el peor momento que viví aquí trabajando. Por encima de todo el estrés, de la angustia cuando hay problemas, del agobio, de tener que correr porque no hay tiempo, por encima de todas estas situaciones, muy por encima, es tener que decirle a un grupo de chavales que no tienen billete por culpa de algo que ni sabes explicarles. A partir de ahí seguimos las instrucciones del staff de la BA y la verdad es que se volcaron con nosotros. Y justo cuando íbamos a irnos a que se sentaran y a seguir pensando qué hacer y cómo manejar la situación, la azafata viene y nos dice que todos pueden volar porque ha habido el mismo numero de no-shows que de niños sin asiento. Obviamente, todo encajaba, tuvo que ser un error entre la agencia e Iberia o la BA, porque es demasiada casualidad. Ni me importó saber qué narices había pasado al final o por qué, los niños pasaron las maletas y corriendo con el monitor se fueron saltando y llorando de alegría. Y fue en ese momento que notas la adrenalina acumulada como se va soltando y te va recorriendo. Nervios fuera.
 
Y la otra situación, ayer. Un grupo de 42 niños rusos y 5 monitoras. Una de las niñas tenía un pequeño problema: su nombre estaba mal escrito en la reserva y teníamos que asegurarnos de que no fuese a tener ningún problema al pasar inmigración en el aeropuerto de destino. Como eran un grupo grande, envié por seguridad al resto y le pedí a una de las monitoras que se quedara conmigo y con la niña hasta solucionar el problema. Se quedó, lo solucionamos y cuando van a pasar seguridad, la monitora, medio entre risas me dice que su tarjeta de embarque y pasaporte están con el resto de monitoras. Para más aquel, tampoco tenía  móvil. Faltaba 1 hora justa para que saliese el avión. No era una broma. Y otra vez, ¿qué puedo hacer yo? Remover cielo y tierra buscando soluciones. La monitora le dijo a la niña que pasase seguridad y que volviese con su pasaporte pero nunca la vimos volver y otra vez la angustia de a ver si se pierde o qué pasa con ella. Espero que esté bien porque a veces hacen cosas sin avisar y es difícil no perder los nervios. El caso es que desde la puerta de seguridad no nos daban muchas soluciones. Ella no tenía más documentación. Llamé a todos los números de las monitoras como 50 veces pero ninguna respondía. Después fuimos a que diesen un aviso por megafonía, para que alguna se acercase a seguridad y poder darle el pasaporte al menos. Al final una de las monitoras respondió el teléfono pero dijo que no podía volver atrás. Ellas dos hablaron en ruso y si se entendieron o no, no lo sé, pero parecía que no. De ahí a un rato hablando con azafatas y contándoles lo que pasaba resulta que le podían sacar otra tarjeta de embarque sin problema y que con eso podía pasar seguridad. A partir de ahí, se tenía que buscar la vida y encontrar su pasaporte y su grupo. El tema es que tenía que irse corriendo y así lo hizo. Cuando estoy a punto de irme de seguridad veo a un guardia con un pasaporte y una tarjeta de embarque. Le pregunto si el pasaporte es ruso y me lo deja ver. Era de la monitora. Alguien se lo dio para que nos lo pasara. Y ella acababa de pasar al otro lado. Gracias que fue amable y obviamente pasó al otro lado, la encontró y me avisó de que todo estaba bien.
 
Sientes nervios, angustia, impotencia, lástima. Puedes hacer poco o nada, salvo mantener a la gente tranquila e intentar buscar soluciones aquí y allá. Eso y después de todo rezar para que todos lleguen bien a casa y no tengan más problemas.
 
Se trata de centrarte, no dejar que el miedo o los nervios te puedan, controlar la situación y hacer todo lo que esté en tu mano. Absolutamente todo y más. Respirar, contar hasta 10, darte esos 10 segundos de pánico y cuando acaben volver a concentrarte en lo que tienes delante. Carry on.
 
 

martes, 23 de julio de 2013

Nunca ser español fue tan difícil.

Y es que ya está bien. Que si los españoles somos esto, que si lo otro. Me tenéis harta. Hartita. Hasta las narices. A mí no me gustan vuestras nacionalidades (o mejor dicho, me gustan menos que la mía) y tampoco voy echando pestes de nadie. Así que hacéis el favor y paráis de una vez porque no estoy dispuesta a pasar ni una queja más de un español.
 
¿De qué hablo? Del trabajo y de los españoles. En concreto, de mi trabajo y de los españoles con los que trabajamos. Como sabéis, soy representante de una compañía de "Language Travel" en Heathrow Airport, y por nosotros pasan muchos muchos grupos de niños de todas las nacionalidades habidas y por haber.
 
Lo bonito y positivo de ello es que aprendes montones sobre cada cultura y de cada una creo que se puede sacar cosas buenas y cosas no tan buenas. En todo caso, respetables, a mi parecer. Pero claro, es sólo mi opinión, y creo que no mucha gente con la que comparto rutina laboral lo comparte, ni así lo expresa.
 
Obviamente, todos tenemos nuestros "favoritos". Es común que, en general, cada nacionalidad se comporte de una forma más característica, aunque en todo hay excepciones. También veo lógico que, por ejemplo, a una persona del norte de Europa (no vamos a entrar en países, que me meto en líos), y por norte de Europa me refiero a todo lo que suba de los Pirineos, les choque más y les resulte más laborioso lidiar con un grupo de países del sur. Y viceversa. Hasta ahí yo creo que todo normal.
 
El problema viene cuando creamos estereotipos, que no solo son malos, sino que también son una memez. Que los españoles hacemos ruido, por ejemplo. Hablamos más alto, dicen. Bueno, es posible, ¿tiene algo de malo? Depende para quien. Pero una cosa está clara, no sólo hablamos alto los españoles. Tendríais que oír a los ingleses en Uxbridge y sus pandas urbanas, que no sé para qué usan el móvil en realidad. ¿Y qué hay de los turistas (guiris) en España? ¿No hacen ruido, no? Eso es.
 
Los estereotipos o clichés están pasados de rosca y en ellos se escuda gente que no ve más allá de sus narices. Poco mundo, diría yo. Es como la gente racista, esa gente es ignorante, que ya es suficiente desgracia.
 
Así que escribo esto hoy porque no sé porqué, pero estoy sensible a comentarios despectivos hacia los españoles. Defendería a todo el sur de Europa, pero es que hoy especialmente necesito contaros qué dicen de nosotros.
  1. Somos ruidosos. Vale, puede que hablemos en un tono más alto, pero eso no está reñido a saber comportarnos. No es excusa para todo, si hablamos más alto y crees que no te escuchan, levanta la voz un poco, no creo que te pique la garganta después.
  2. No sabemos hablar inglés. Es cierto que el nivel de inglés en España es bajo y que muchas veces da pena, sobretodo si te encuentras con profesionales que lo deberían dominar bien. También es cierto que el acento es muy fuerte en muchos casos, pero vamos a ver, ¿alguien ha escuchado a un francés hablar inglés? Creo que es algo criticable pero no para usarlo como algo despectivo, sobretodo si lo dice gente que no sabe hablar más que dos idiomas, uno de ellos pequeño como la población del país donde viven.
  3. No sabemos estar quietos. Sabemos estar quietos, sólo hay que saber cómo pedírnoslo. Es como hacer filas, sabemos hacerlas, sólo que nos gusta más formar grupitos desordenados. No es que no sepamos hacer cosas, no somos retrasados, sólo puede que haya que tener más paciencia con nosotros, pero no con todo el mundo.
  4. No escuchamos y no obedecemos. Si es que todo lo tenemos nosotros. No escuchamos, no obedecemos, no nos movemos cuando nos mandan, no nos quedamos quietos cuando nos mandan. De verdad, es un poco ya quejarse por quejarse. Hay niños que obedecen y otros que no, importa poco la nacionalidad. Si no obedecen a la primera, un poco de paciencia y a ser firme que al final son niños y personas, parece que algunos se olvidan.
Ahora os diré lo que somos:
  • Somos vivos y alegres.
  • Tenemos sangre en las venas
  • Somos cariñosos y nos gusta expresar lo que sentimos.
  • Creamos vínculos afectivos.
  • Nos abrimos a los demás, no somos sectarios.


De todos los grupos que he tenido, y son de muchas nacionalidades, los que más tengo son italianos y españoles. Y yo encantada. A veces te cansan, como te puede cansar cualquier grupo revoltoso, pero yo con los españoles me llevo bien, me hacen caso y tengo la paciencia que se necesita. Son niños, hablando en términos generales, más revoltosos pero que al final te hacen pasar un buen rato y agradecen que se les trate como niños y no como "españoles latosos".  Cuando les digo que se comporten para parecer "alemanes" o "ingleses" se ríen y les digo que así no nos echarán la bronca sin razón, sólo por el hecho de ser españoles. Pero es cierto, el alboroto genera bronca, con o sin razón aparente.
 
Hay grupos de niños que son una maravilla, como los chinos. Los chinos son lo más. Son majos, un poco serios, educados al máximo y obedientes como los que más. Para trabajar con ellos es un lujo, porque te siguen hasta el pestañeo del ojo derecho. Ahora bien, los niños deben de ser niños y un buen comportamiento no está ceñido con una disciplina tan severa. Creo que hay un punto de equilibrio intermedio que es mejor para todos. Quizá no seamos nosotros el mejor ejemplo, pero los demás no pueden fanfarronear, todos tienen sus puntos negativos.
 
Hoy estoy patriótica, me han cabreado hoy, y no precisamente los niños. A veces a mí también me cansan los grupos de españoles. Dan más que hacer, por norma, pero sinceramente, estoy encantada con tener que "esforzarme" ese poquito más, porque al final, me lo paso muy bien con la mayoría.
 
Y un punto y final, una reflexión. Nosotros, españoles, reflejamos muy bien lo que nos pasa, reflejamos y exteriorizamos más que otras nacionalidades lo que pensamos, somos más impulsivos también. Un niño alemán, o nórdico, o de países menos cálidos (sigo sin querer apuntar con el dedo) sea "educado" (creo que la "educación" puede ser hasta relativa, según cómo se mire) no quiere decir que esté de acuerdo con lo que le mandas hacer ni a donde ir. No te responderá mal, pero hará y pensará lo que le de la gana. Yo, prefiero que el niño proteste, así al menos sé qué piensa. Y hablando se entiende la gente.  
 
Yo os defiendo allá donde estéis (siempre que no me canséis, si no, os amenazo un poco y santas pascuas) :D
 
Un saludo especial a todos los españoles que puedan sentirse identificados con esto o que estén hartos de escuchar a la gente protestar por nuestra forma de ser. Al fin y al cabo, al final todos quieren un poco de sol, un poco de playa, un poco de comida y les gustaría que su idioma sonase tan bonito.
 
 
 

lunes, 15 de julio de 2013

No es el lugar, es la gente.

 
 
¿Dónde vives? En Londres. Mi respuesta es cierta, sin embargo, yo que sé la verdad verdadera (y unos pocos privilegiados más) suena un poco raro.

Where do you live? In London. That's right! However, truth is, it doesn't feel so.  
 
Oficialmente, esto es Londres. Uxbridge pertenece al London Borough of  Hillingdon, es Greater London, es Londres, sin embargo, es un sentimiento raro. Esto es un pueblo de la zona 6, llegan dos líneas de metro, tienes todo lo que necesitas, pero estás lejos del centro, la verdad sea dicha. A mí Uxbridge me gusta, reconozco que le he cogido cariño y somos como una familia aquí, con sus tribus urbanas y rurales y con sus peculiaridades. Pero bueno, me mudaba al centro ahora y sin maletas.

This is, officially, part of London. Uxbridge belongs to the London Borough of Hillingdon, Greater London, however, you don't get the feeling of trully living in London itself. This is a little town in zone 6, two tube lines get here, you have everything you need, but you're far away from central, that's the whole point. I like Uxbridge, we're like a family here, with our own urban tribes - and not-so-urban ones, and with all its special things. To be honest though, I would move to central right now, without even packing my stuff.
 
Pero empecemos por el principio, yo vivo en Uxbridge, pero ni siquiera en Uxbridge centro, vivo en el campus universitario de Brunel, a 10 minutos andando del centro o a 5 min cogiendo el querido U3. Es un campus en toda regla, con sus residencias, con su supermercado, con sus bares (pequeños), con sus guardias de seguridad (corta-rollos) etc etc. Vivo en una de las residencias, se llama Galbraith Hall, en un apartamento que comparto con 5 personas más. Lo bueno de vivir aquí es que tienes seguridad y que realmente es como estar en un hotel, más o menos. Las señoras de la limpieza pasan casi todos los días y dan un repaso al suelo, al baño, cambian toallas y sábanas y si hace falta, te hacen hasta la cama. Conste que yo paso la aspiradora el fin de semana y hago la cama todos los días. También nos limpian la cocina. Pero eso también lo hago yo, aunque no todo el mundo así que un poco de ayuda nunca viene mal.

First things first. I live in Uxbridge, but not even in Uxbridge centre. I live at Brunel University Campus, a 10 minute walk from the centre or 5 by lovely U3 bus. It's got the whole campus package: student halls, bars, security, etc etc. I live in Galbraith Hall, in an appartment that I share with other 5 people. The good thing about living here is, first, that there's security and it's so safe; secondly, it's kind of living in a hotel. The cleaning ladies come almost everyday, they tidy up, they vacuum, they clean the bathroom, change towels and sheets.. and if needed, they even tidy up your bed. I do vacuum on weekends and I do tidy up my bed every single day, I have to say. They also clean the kitchen. But that is something I also do, although not everyone does so a little help doesn't hurt.
 

 
 

Seguimos, en Uxbridge hay lo básico y lo no tan básico, que yo soy de Sanci y sé lo que es un pueblo sencillito. En cuanto a transportes, tenemos buses, taxis (los negros oficiales y los mini cabs que son como taxis pero clandestinos y más baratos), y una estación de metro. Eso es bueno, al menos tenemos metro. Uxbridge, concretamente, es final de dos líneas, la Piccadilly y la Metropolitan. Con la Metropolitan, te plantas en Londres centro en 30 minutos; con la Piccadilly, al día siguiente.

Moving on, in Uxbridge there's basic and not-so-basic stuff. Regarding transportation, we got buses, cabs (the official black cabs and the non-official mini cabs, cheaper option by the way), and a tube station. That's actually a good thing, at least we got the tube. Uxbridge, more precisely, is the very end of both Piccadilly and Metropolitan lines. If you take the Metropolitan, you get to central in 30 minutes; if you hop on the Piccadilly train, you'll get there the next day.

 
 

Para hacer la compra, hay donde elegir. Tenemos un Lidl, un Tesco, un M&S y un Sainsbury's. Yo soy más de Sainsbury's, tienen pescado y carne frescos y mucha más variedad en muchas cosas. Si quieres ir de compras, pero no precisamente comida, tenemos dos centros comerciales, The Pavillions, y The Chimes (aunque ahora le han cambiado el hombre a "Intu Uxbridge") que aunque no son enormes tienen un poco de todo, tiendas como River Island o Topshop y hasta cines.

If you need to do some shopping, there's quite a few choices. We got Lidl, Tesco, M&S and Sainsbury's. I prefer Sainsbury's because it's got fresh fish and meat and more variety, in general. If you want to do some shopping - not grocery's shopping, we have two shopping centres: The Pavillions and The Chimes (recently re-named "Intu Uxbridge") that although  not massive, have nice stores like River Island or Topshop.




 
 
Si hace un buen día, siempre puedes ir a pasear a la orilla del canal o pasar el día en Fassnidge Park. Es un parque pequeño, pero es nuestro "Hyde Park" particular. ¡A mí me gusta y me sobra! Pero lo mejor de todo es que tenemos una piscina. La descubrí hace poco y la verdad es que ha cambiado mucho las cosas. Está en Hillingdon, que está aquí al lado, de hecho, se va caminando. A 10 minutos del centro del pueblo, pagas 5 libras y ¡a disfrutar! No puedo imaginarme otro día de verano más sin estar allí.

If the weather is nice, you can always go for a walk by the canal or hang out in Fassnidge Park. It's small, but it's our local "Hyde Park". I love it! But here's the great stuff: we have an outdoor pool. I recently found it and truth is, it's changed my life. It's located in Hillingdon, which is really really close - so close you can actually walk there, it's just a 10 minute walk from Uxbridge centre. You have to pay 5 pounds to get in and that's it! You can start having fun! I can't even imagine a summer day somewhere else.




 
Si quieres salir a tomar algo o incluso comer, hay un sitio en particular que es mi debilidad, The Fig Tree. Un pub/cervecería precioso, con una terraza estupenda y donde siempre me lo paso genial. The Slug and Lettuce es más rollo pub de copas, también con buen ambiente y una terraza en High Street donde se está muy a gusto. Discoteca sólo tenemos una, Liquid. No es lo mejor del mundo, pero tengo muy buenos recuerdos de noches allí el año pasado y como Londres centro queda lejos, de vez en cuando no está mal.

If you want to go out in the evening or at night, there's a super special place, The Fig Tree. It's a beautiful english pub, with a lovely terrace and where I always have so much fun. The Slug and Lettuce is more like a "cocktail" bar but still really nice. We only have one club, Liquid. It's not the best club ever, but I have lots of good memories in it  from last year.

 
 
Como suelo decir y los que me conocéis lo sabréis, creo que las experiencias y la vida se llenan de recuerdos de lugares que te dejan huella. No creo que un lugar deje huella por ser bonito o por tener los mejores restaurantes; es la gente la que hace los lugares especiales y lo que hace que se te queden grabados para siempre.

As I usually say, and those who really know me will know, I think experiences and life itself are filled with memories of places who made a difference at a certain time, somehow. I don't think a place makes a difference because of its nice restaurants; I think people make the difference. It's people who make places special and unforgettable.
 
No es el lugar, es la gente.
It's not the place, it's the people.
 
Hoy hace un mes que llegué y me queda un mes y un día para volver á terriña. Hoy tengo morriña y al mismo tiempo quiero que se pare todo y disfrutar de esto hasta el final.

It's already been a month since I arrived here and I have one month and one day to go. I feel homesick today but at the same time I want to stop the clock and keep making each day count.

 
 
 

jueves, 4 de julio de 2013

Cuando llega EL día, y sobrevives.




 
 







Tenía pensado hablaros primero de Uxbridge, de Londres y de cómo vivo aquí pero estoy en modo "resaca" laboral y creo que es un buen momento para hablaros del porqué.
 
A post about Uxbridge, London and to explain you how I live here is what I originally had in mind for today, but as I am in "working hangover" mode, I think it's a good moment to tell you why so.
 
Ayer ha sido EL día. Con mayúsculas. Es un día que, si sobrevives, te sientes capaz de cualquier cosa. ¿Por qué? Porque por mucho que se tuerzan las cosas, por muchos contratiempos, al final todo se acaba solucionando y te sientes parte de ese pequeño triunfo.
 
Yesterday was THE day. Capital letters. It's a kind of day that, if you are able to survive, you feel like you can do anything. Why? Because no matter how difficult things turn, how many problems you have, in the end everything is sorted out and you feel a part of that tiny triumph.
 
Pero vayamos por partes. Ayer, día 3 de julio, fue el día más complicado y más largo y más ajetreado de todo el verano para nosotros, representantes. No sé la cifra exacta de niños que llegaron o se fueron, pero os diré que el horario de ayer tenía 5 páginas. Desde las 6 de la mañana hasta las 12 de la noche, cada uno tenía su horario y sus tareas asignadas para que todo al final funcionase. Hay tantas cosas que pueden ir mal y es un día tan delicado que hay que ir con dosis extra de paciencia y de sangre en las venas. Paciencia porque no hay que perder los nervios, y sangre en las venas para ser ágil, rápido y reaccionar ante problemas. Hay gente que lo lleva mejor, otros peor. Yo soy de las que lo lleva bien. Quizá por eso de que es el segundo año que lo experimento y la experiencia es un punto a mi favor.
 
But first things first. Yesterday, July 3rd, was the most complicated, longest and busiest day in the whole summer for us, reps. I don't reckon the exact amount of students that arrived or left LHR but I will tell you that our schedule was 5 pages long. Starting at 6 in the morning until midnight, everyone had their own schedule to work with and their own tasks for the day. There are so many things that can go wrong and it is such a delicate day you need to have extra patience and extra blood in your veins. Extra patience because you have to remain calm and blood in your veins because you need to be fast and react to problems quickly and efficiently. Some people handle it better than others. I think I handle this days pretty well. Maybe because this is already the second year I go through a day like this.
 
Ayer yo debía empezar mi día a las 6 de la mañana, pero un compañero (más tozudo casi ya no se puede ser, excepto yo misma) decidió que él haría ese turno y que yo podía empezar más tarde (tozudo pero adorable por hacerme ese favor). Al final empecé mi día a las 8 de la mañana en el aeropuerto. Eso requiere levantarse a las 7 para coger el autobús a las 7:30. Así que mi día empezó, en realidad, a las 7 de la mañana. Mochila lista con provisiones, horarios, varios teléfonos móviles, etc. Ese día no te llevas ningún libro porque si ya sacar tiempo para comer es complicado, para darse el gusto de sentarse y leer, no os quiero decir nada.
 
I was supposed to start my day at 6 a.m. but a most stubborn colleague took over for me and decided that I could start later. In the end, I started at 8 a.m. That means waking up at 7 and taking the bus at 7.30. So my day started, basically, at 7. Bag ready with food, schedules, several cell phones, etc. That day you don't get to carry a book because you don't really get time to sit down and read a bit.
 
 
Los autobuses de por la mañana fueron saliendo más o menos en hora, los vuelos llegaban a su hora y todo iba sobre ruedas. No parecía en ningún momento un día diferente a los demás, salvo quizá porque teníamos un montón de ayudantes extra que no conocíamos. La calma antes de la tormenta. Porque después, cayó el diluvio.
 
Coaches during the morning departed pretty much on time, flights were on time as well and everything went smoothly. It didn't seem to be such a hectic day, or any different from any other day, except for the fact that we had lots of extra staff helping out. The calm before the storm. Because from that moment on, the storm started.
 
Tras trabajar hasta la 1 de la tarde, más o menos, en la terminal 5 (la mejor terminal del mundo, y no lo digo yo, fue elegida así en 2012) tuve que cambiar e irme a la terminal 4. El moverse de la T5 a la T4 (y viceversa) es lo peor que te puede tocar hacer. Debes coger el Heathrow Express (tren) a las terminales 1 y 3 (la estación está a medio camino entre las 2, más cerca de la 3 de todos modos) y allí cambiar a otro tren para la T4. Tiempo medio que te puede llevar: 20 minutos - 30 minutos. Si vas tú solo vale, pero con grupos de niños es lo peor.
 
After finishing in T5 at 1 p.m. aproximately (best terminal in the world, chosen in 2012) I had to transfer to T4. That's the worst transfer you can ever do. You have to take a train to terminals 1 and 3 and then another one to terminal 4. It takes about 20-30 minutes. It's ok if you're going on your own, not when you're taking students with you.
 
En la T4 todo iba bastante bien, ayudé a algún compañero que estaba teniendo algunos problemas menores y recibí a un grupo de italianos allí que se marcharon más o menos a su hora también. Me llevé a una de las niñas a la T3 y ahí empezó el caos. Cuando llegué a la T3 ya habían llegado 45 niños procedentes de Bilbao que habían recibido otros compañeros al no estar yo, y me estaban esperando. Hasta ahí, bien. El problema era que había tantos grupos que separar por destinos y por autobuses que era como para que te de un infarto. Pero no, todavía no había llegado lo peor. De repente, mientras intentaba cuadrar todo el desmadre, me entero de que 8 o 9 niños se perdieron por el camino hacia la terminal. No eran de mi grupo, pero eso es lo peor que puede pasar. Los retrasos se solucionan, las maletas que se pierden se reclaman, pero los niños. Los niños no se pueden perder. Al final aparecieron y logramos manejar la situación. Y mi momento había llegado: tenía que llevarme a 45 niños de la T3 a la T5. Transfer fácil, salvo por la masa de niños que suponía y la situación previa de caos. Les dí un pequeño discurso de "no os perdáis, no hagáis el tonto, seguid las instrucciones para que todo salga bien y os podáis ir del aeropuerto a disfrutar de Londres cuanto antes". Todos hicieron caso, yo los conté cada 5 minutos y todos llegaron sanos y salvos a la terminal.
 
In T4 everything went quite well, I helped a colleague that was having some minor issues and I picked up a group of italians that left more or less on the expected time. However, one of the girls had to be transfered to T3 and there was when chaos began. When I get to T3, 45 students from Bilbao had already arrived and good for me, some of my colleagues picked them up for me as I was running late. So far, so good. The problem was that there were so many students going to different destinations that we had to figure everything out and split the groups correctly, and that seemed to be like a little nightmare. But the worst was to come. All of a sudden, I learn that there are 8 or 9 students missing, that they got lost when transfering terminals. Delays are sorted out, missing luggage can be claimed but missing kids CAN'T HAPPEN. Finally, we found them and we got to handle the whole situation. After that, I had to transfer 45 students from T3 to T5. Easy transfer, except for the fact that they were a massive group. I gave a little speech about how they should listen to what I say, how they should just follow the group and me so that we all make it to the next terminal, to the coach, and then can soon began to enjoy their trip to London. Everyone behaved, I counted them every 5 minutes and everyone gets to T5 safe and sound.
 
Cuando llego a la T5 y creo que lo peor ha pasado. ZAS! Pues no. Por aquel entonces ya todos los autobuses iban a salir con bastante retraso y había que actuar con rapidez. Coloco a 10 niños de Bilbao en una zona separada de los demás (porque iban en diferente autobús) y a los demás los intento ubicar con los otros grupos de niños que viajan con ellos en el autobús. Otra sección de mis 45 españoles la dejo con una compañera, que se encarga de ese autobús y se lo agradezco eternamente. Intento contactar con los compañeros con los que teníamos autobuses en común y a ponernos de acuerdo para poder sacarlos cuanto antes. Al final, acabo haciéndolo yo sola porque a veces es mejor estresarse una misma y hacerlo que tener a gente estorbando por el medio. Cuando consigo sacar el segundo bus, me queda otro más. Uno de los monitores en destino que está en el aeropuerto casi se vuelve loco buscándome y yo disculpándome pero es que más no podía hacer. El autobús llega tarde, pero llega. ¿Pero y el conductor? No aparece. Y cuando aparece resulta que la dirección que tiene apuntada no es la correcta. Al final los niños ya con ganas de matarme de tanto que les he mandado esperar, y de tantas veces que les he dicho que solo eran 5 minutos más y al final esos 5 se convirtieron en 40. Media hora mas tarde, el autobús se va y mi turno se acaba.

When I arrived in T5 thinking the chaos was over, ZAS! Guess what? It was not. By then, all coaches were going to leave later than scheduled and we had to act quickly and efficiently to make things work. I split my 45-student group in 3 (as they were travelling to different destinations and, therefore, in different coaches). I leave 10 of them sitting in a waiting área while I handle the other 2 coaches quickly. Fifteen students from my group join some other groups and a colleague takes over for me so that I could carry on with the rest. I contact some other staff working on the same coaches as me so that we can coordinate in order to load the coaches as soon as posible. In the end, I ended up making everything by myself, because honestly, sometimes people just keeps holding you back and you'd rather take control. One coach off, only one more to go. One of the activity leaders was going nuts trying to find me and I could only apologize for the waiting but what could I do anyway?  That coach was a bit late, but then it showed up. But the coach driver? Missing. It was a ghost coach, as the coach marshal said. I had to laugh at it, I had to take at least that minute to laugh at the awkard situation. When he shows up, the address he has in destinatioin is not correct and it took about 30 minutes to sort that out. Students wanted to kill me and I totally undersood: I had been telling them we had to wait just for 5 more minutes; then for another tiny 10 minutes and they were obviously tired of waiting so long. Good thing is, it was soon off and my shift was over.
 
 
Podía haberme ido a casa, pero no me fui. Muchos compañeros necesitaban ayuda o todavía estaban a mil y yo sentí que podía ayudar o al menos echar un ojo. Así que lo hice, 2 horas más, hasta que vi que era absurdo seguir allí porque tenían todo bajo control. Me fui a las 22:40 de la T5, cogí el metro hasta las terminales 1 y 3 y subí a la estación de autobús. A las 23:45 llegué a casa y allí sí que terminó el día.

I could've gone home, but I didn't. There were colleagues still having lots to do so I decided I could stay around a bit longer and help. So I did, 2 more hours there and then I decided there was no point for me to stay there longer. I left at 22.40 from T5, took the tube to terminals 1 & 3, went upstairs to the Central Bus Station and got home at 23:45.
 
La sensación del trabajo bien hecho es muy gratificante y eso unido al alivio, la descarga de adrenalina, el cansancio en las piernas, el dolor insoportable en los pies y el silencio de un aeropuerto a punto de dormir es una sensación relajante para mí, por muy contradictorio que parezca.

The feeling of having done your best is really fulfilling. Besides, the adrenaline, the physical effort and the silence in an airport that is about to go to sleep is a very relaxing feeling for me.
 
Voy a seguir con mi "resaca" laboral, quiero volver a mi cama y que mis pies y piernas se recuperen.
 
:-)